Las gafas de sol son un accesorio de moda muy popular, pero también son una herramienta importante para proteger los ojos de los rayos ultravioleta del sol. Cuando se trata de los niños, es importante asegurarnos de que estén protegidos, especialmente durante las horas del día en que el sol es más fuerte.
En este artículo te contamos a partir de qué edad se recomienda poner gafas de sol a los niños y por qué es importante hacerlo.
¿Por qué es importante proteger los ojos de los niños?
Los ojos de los niños son más sensibles a los dañinos rayos ultravioleta (UV) del sol que los ojos de los adultos. De hecho, los niños reciben hasta tres veces más radiación UV al año que los adultos, lo que aumenta el riesgo de problemas oculares a largo plazo, como cataratas o degeneración macular.
Además, los niños suelen pasar más tiempo al aire libre que los adultos, especialmente durante las horas del día en que el sol es más fuerte, lo que aumenta aún más su exposición a la radiación UV. Por lo tanto, es importante que los padres y cuidadores tomen medidas para proteger los ojos de sus hijos del sol, y una de esas medidas es asegurarse de que usen gafas de sol adecuadas.
¿Cuándo deberían los niños empezar a usar gafas de sol?
No hay una respuesta única a esta pregunta, ya que la edad recomendada para que los niños usen gafas de sol puede variar según diferentes factores, como la zona geográfica en la que viven, la época del año y las actividades al aire libre que realizan.
En general, se recomienda que los niños comiencen a usar gafas de sol a partir de los seis meses de edad, especialmente si pasan mucho tiempo al aire libre o viven en áreas con una alta exposición a la radiación UV. Los bebés y niños pequeños tienen la piel y los ojos más sensibles que los adultos, por lo que es importante elegir gafas de sol con lentes que bloqueen al menos el 99% de los rayos UVB y UVA.
Catálogo de Gafas de Sol para niños
A medida que los niños crecen, su capacidad para protegerse de la radiación UV mejora, pero aún es importante que usen gafas de sol cuando estén al aire libre. Los niños que pasan mucho tiempo al aire libre jugando deportes o haciendo actividades al aire libre también deben usar gafas de sol para niños que protejan sus ojos de la radiación UV.
En el caso de los bebés, existen gafas diseñadas específicamente para ellos, con modelos que se ajustan a su cabeza mediante una banda de neopreno que incorpora un velcro para regular el tamaño. Además, estas gafas cuentan con colores atractivos y son muy confortables para los pequeños.
Es importante destacar que las gafas de sol deben estar homologadas y contar con un etiquetado o documentación que acredite su cumplimiento con la normativa europea. Además, deben proporcionar protección contra los rayos UV y el número que indique el tipo de filtro que ofrecen. Los pediatras recomiendan filtros de categorías 3 o 4 para los niños, en colores gris o marrón, ya que son los que menos modifican los tonos de la realidad.
Como ves, resulta muy importante proteger los ojos de los niños de los dañinos rayos UV del sol. Se recomienda que los niños comiencen a usar gafas de sol a partir de los seis meses de edad, especialmente si pasan mucho tiempo al aire libre o viven en áreas con una alta exposición a la radiación UV.